Carta #1 de Adara.

Soy Adara…y soy una sirena.

No sé cómo empezar a compartir mi historia, quizá tengan curiosidad sobre cosas ordinarias en mi vida… ¿mi vida? ¿Qué es la vida para mí? Ni yo misma lo sé.

Empezaré por confesar que nosotras las sirenas somos inmortales, si, jamás morimos. Ya he perdido la cuenta de todo, estoy cansada. He sufrido mucho, todas las de mi especie hemos sufrido. Vivimos entre nuestras lágrimas, entre nuestro sufrimiento… EL MAR. ¿No lo sabían? Seguro no tenían idea que toda esa inmensa agua salada es consecuencia de nuestro dolor, dolor salado.

Les contaré el más grande de nuestros secretos, deben tener cuidado con nosotras, las sirenas no somos buenas. Terminamos por robarles a ustedes (si a ustedes los humanos) eso que los hace tan especial.

Podemos convertirnos en forma humana, así como tú, cuando tenemos el ánimo de vivir, y cuando no, nos pasamos nadando por todo el ancho mar, ocultándonos de ser vistas en nuestra forma original… quizá tengas una sirena por amiga y no te has dado cuenta. ¿Te ayudo a identificarla? Debes estar alerta antes que ella decida por ti.

Una sirena es bella, bella por fuera y por dentro, tienen un encanto único… esto nos funciona para atraer al igual a humanos bellos, pero no de belleza física, si no del  alma.

Vivimos rodeadas de esos humanos. Para vivir a diario necesitamos de ellos, de su energía, una sirena siempre tiene muchos amigos. Así succiona de poca cantidad a cada uno, pero debemos tener cuidado, porque si succionamos demasiado ustedes mueren.

Nosotras también nos enamoramos. Puede que tú te hayas o estés enamorado de una sirena y no lo sabias hasta hoy. 

Cuando nos enamoramos, entregamos todo… nos hacen sentir de su especie, nos envuelven en su vida, nos hacen nuestra inmortalidad más liviana, es simple, nos entregamos a ustedes.

Los humanos que tienen por pareja a una sirena siempre estarán llenos de abundancia, alegría, amor, dinero, todo lo tendrán… es nuestra forma de agradecer el hacernos sentir vivas.

Pero como todo… también existe la parte malvada. Cuando uno de ustedes hiere nuestros sentimientos y juega con nosotras, los matamos en vida. Les succionamos tanto el alma que solo dejamos una pequeña cantidad para que vivan su desgracia por lo que les queda de tiempo, esos que ven por ahí penando por un amor… fueron víctimas de nosotras, muchos no lo soportan y deciden acabar con su sufrir ellos mismos. No tenemos piedad cuando nos lastiman.

Y se preguntaran que pasa cuando el tiempo de nuestro amor humano llega a su fin. Una sirena jamás deja que sus amores lleguen a su fin… cuando hablo de amores me refiero a lo que ustedes llaman padres, amigos, pareja, hijos.

Sabemos que no son eternos y para nosotros es el motivo de nuestro sufrir: nuestros amores.

Es por eso que me siento una malvada, pues antes que nuestros amores partan de esta realidad, les quitamos el alma y las guardamos en nosotras, así ellos vivirán dentro nuestro por toda la eternidad. 

¿Cómo saber que una sirena te ha escogido como su amor? Si le das la confianza, ella te lo dirá. Te dirá que siempre te amará, que te escogerá en cualquier vida…y si no te lo ha dicho, ella siempre estará cuidando de ti… tratará lo más posible de estar cerca tuyo. Cuidamos muy bien a los nuestros, demasiado diría yo, aunque muchas veces no lo hagamos notar.

Linda vida, humanos.

Atte. Adara.